Seamos realistas, hay muchas razones para comprar online. Las gangas están ahí. La selección es alucinante. La compra es segura. El envío es rápido. Incluso las devoluciones son bastante fáciles, con los minoristas electrónicos correctos. Comprar nunca ha sido más fácil o más conveniente para los consumidores.
¿Pero qué hay de los malos que están a la espera? Hoy en día no son pocos los casos de fraude informático, robo de identidad o robo de cuentas.
Mantén la calma. Aunque es algo alarmante, estas noticias no deberían impedirte comprar online. Simplemente necesitas un poco de sentido común y algunos consejos prácticos. Hoy en TusIdeas, os dejamos algunas indicaciones para comprar online con seguridad y confianza.
Usa sitios web conocidos
Cuando necesites comprar algo online, accede en primer lugar a sitios web que conozcas, ya sea porque algún amigo o familiar trabaja en ellos o ya ha comprado en ellos, o porque son conocidos a nivel mundial, como es el caso de Amazon.
Busca el candado
Nunca jamás compres algo online con tu tarjeta de crédito desde un sitio que no tenga cifrado SSL (capa de conexión segura) instalado, como mínimo. Sabrás si el sitio tiene SSL porque la URL del sitio comenzará con HTTPS: // (en lugar de solo HTTP: //). Aparecerá un icono de candado cerrado, generalmente en la barra de estado en la parte inferior de su navegador web, o justo al lado de la URL en la barra de direcciones. Depende de tu navegador. En TusIdeas, sin ir más lejos, puedes comprobar cómo es este candado.
No lo cuentes todo
Ninguna tienda de compras online necesita tu número de la seguridad social o tu fecha de cumpleaños para hacer negocios. Sin embargo, si los ladrones los obtienen, combinados con tu número de tarjeta de crédito pueden causar mucho daño. Cuanto más sepan, más fácil es robar tu identidad.
Salvo en algunos casos excepcionales, lo normal es que soliciten los datos necesarios para poder realizar una factura de tu compra, que son Nombre y Apellidos, DNI, Dirección, Código Postal y Población (además de, obviamente, los datos de tu tarjeta de crédito o débito para poder cobrarte). Desconfía de sitios web que te pidan más datos, salvo casos excepcionales (como portales web de las administraciones públicas, por ejemplo).
Verifica tu extracto a menudo
Si eres de aquellos que compran online varias veces al mes, no pases demasiado tiempo sin consultar tu extracto. En la mayoría de ocasiones no debería suceder nada extraño, pero basta que dejes de mirar el extracto un par de semanas para encontrarte con un par de cargos que no deberían estar ahí (productos gratis cuyo período de prueba ha expirado, productos que se renuevan cada mes o sencillamente, productos que no valen el precio que te han cobrado).
Atendiendo a estos consejos no sólo sabrás identificar qué sitios web merecen tu confianza como comprador, sino también cómo evitar más de un disgusto al hacer tus compras online.
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