Seguro mientras navegabas por Internet buscando información sobre las ventajas de abrir un blog has leído en otros artículos que es genial para tu SEO, es fácil de comenzar y no requiere demasiado mantenimiento. Y si bien todo esto es cierto, tampoco es tan sencillo como escribir un artículo de trescientas palabras y esperar a que la magia haga el resto.
Para crear un blog que beneficie a tu empresa y resulte rentable comparándolo con el tiempo o la inversión que va a exigir, hay algunas preguntas que deberías responder a fin de decidir cómo hacerlo.
¿Cuáles son tus metas?
Al igual que ocurre con otras estrategias de marketing, tu blog debe tener un objetivo que pueda medirse. Algunos de los objetivos más comunes son los siguientes.
Ganar credibilidad
La credibilidad puede darte mucha ventaja sobre tu competencia, y un blog es una herramienta ideal para construir credibilidad. Es el lugar perfecto para que tus empleados compartan sus conocimientos, su experiencia y sus opiniones sobre por qué tus productos o servicios resultan indispensables.
Aumentar el valor de tu sitio web
Los motores de búsqueda toman en gran consideración el nuevo contenido en tu página web, así que subiendo nuevos artículos a tu blog de manera periódica, diríamos coloquialmente que ‘alimentas a la bestia’ a menudo. Esto, sin duda, te permitirá a largo plazo aumentar las palabras clave para las que tu página web posiciona en las listas de búsqueda, y con ello, el tráfico que recibe.
¿Estás preparado para invertir?
Aunque hayas leído por ahí que crear un blog sea la manera de hacerse rápidamente rico sin necesidad de invertir absolutamente tiempo, lamentamos afirmar que esto es completamente falso.
Si bien es cierto que tienes la posibilidad de decidir entre invertir tu tiempo para mantener tu blog tú mismo, si no dispones de ese tiempo te verás obligado a contratar a alguien para mantenerlo (ya sea uno de tus empleados o una empresa externa).
En este sentido, un gestor de cuentas de redes sociales y un escritor profesional no resultan precisamente baratos, pero son una inversión que merece la pena. Con tantas empresas de tu competencia creando blogs, la única manera de destacar es hacerlo especialmente bien, diferenciarte, y ofrecer un valor que otros no ofrezcan (o que sí ofrezcan pero tu empresa lo haga mejor). Y esto se aplica tanto en el caso de que seas tú el que gestione el blog, como en el caso de que contrates ayuda especializada.
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